Inocencia interrumpida:
Trata de una joven
llamada Susanna Kaysen que tras un intento de suicidio es enviada interna a un
hospital psiquiátrico. Allí conoce a una serie de chicas que acaban
convirtiéndose en sus amigas, que también tienen diversos trastornos mentales y
le ayudan a comprender el suyo.
Susan es diagnosticada con que tiene Trastorno
Límite de la Personalidad, enfermedad que provoca inseguridad, impulsividad y
problemas respecto a las relaciones sociales.
Mediante la
película podemos ver la evolución de la protagonista: En un primer momento
cuando llega cree que no está verdaderamente enferma, y realiza actos como
rechazar los medicamentos o intentar fugarse con su amiga Lissa.
Más tarde, a través
de una especie de acontecimiento traumático (El suicidio de Daisy) Susanna decide volver al hospital, ya que se había
fugado, y comienza a tomarse de otra forma su enfermedad: Comienza a aceptarla,
y a hacer todo lo que sus médicos le mandaban y a ser sincera con ellos.
Tras su nueva
mejoría, consideran que la protagonista está totalmente rehabilitada y que ya
puede continuar su vida normal. Sin embargo, a mí personalmente esta película
me crea varias cuestiones que no sé si quedan del todo resueltas:
Para empezar, tras el final de la película a todos se nos
plantea la duda del motivo de la cura de la protagonista. Ya que en un primer
momento pensamos que es debido a hacer
caso a las indicaciones de sus psicólogos. Pero si nos paramos a pensar, ella
ha mejorado algo respecto a su enfermedad? Lo que es obvio es que ya no se
quiere suicidar y eso es una gran mejoría.
Ella siempre se
consideró una persona inadaptada, impulsiva… Pero por ello ha de ser
considerada una enferma? Y en el caso de que si que estuviera enferma de
verdad, ¿Se ha curado tras su estancia en el hospital?
Son temas profundos
que trata la película y que nos hacen pensar sobre muchas imposiciones sociales
de nuestra vida.
María Hernando Martínez 2ºC
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